3-1: Un Almería irreconocible en La Coruña

El Almería sufrió un duro castigo en el Abanca Riazor donde el Deportivo de La Coruña lo desbordó en el primer tiempo que ya acabó con el resultado de 3-0 y con la confrontación sentenciada. El conjunto almeriense estuvo irreconocible, aunque luego, en el segundo, intentó lo imposible. Rubi comentaba en las vísperas que los jugadores estaban mentalizados de que ya llegaban los momentos de la verdad, pero éstos se han instaurado en la competición y el conjunto almeriense no los está aprovechando, si bien sigue en la pelea por el ascenso. En cualquier caso son cuatro jornadas sin ganar, con dos derrotas a domicilio y otros tantos empates en casa ante rivales directos... Y el próximo lunes, día 17, viene el Elche.

Los primeros períodos no están siendo buenos para el Almería, y en La Coruña buscó salir de inicio a por el rival, y lo hizo con intensidad, presionando... Tanto, que al minuto de juego Luis Suárez casi le roba el balón al metal local. Pero solo fue un espejismo porque los indálicos se vieron pronto desbordado por un Deportivo de La Coruña vertical, rápido y agresivo, que en doce minutos sentenció la confrontación. En el minuto 19 las cosas empezaban a complicarse, y además de qué manera porque Zakaria, uno de los fichajes de invierno del Dépor, marcaba el 1-0 de tiro ajustado al palo; una acción muy dudosa y revisada por el VAR por posible fuera de juego que no se llegó a confirmar. El conjunto almeriense se descompuso y buena prueba de ello es que estuvo a merced de su adversario. Yeremay, en el 26, hacía el 2-0. Se metió hasta la línea de gol, prácticamente, y se aprovechó de un resbalón de Edgar para plantarse ante Maximiano y superarle. Poco después, en el 31, Mella fue buscando la mejor posición para desde el borde del área cruzar la pelota lejos del alcance del portero portugués del Almería. Era el 3-0. Fueron tres zarpazos que dejaron la cara marcada a un conjunto almeriense que tuvo sus opciones, pero sin efectividad, todo lo contrario que su adversario.

Rubi había realizado algunos cambios, sobre todo arriba, ya que por detrás de Luis Suárez puso una línea de tres con Leo Baptistao por la derecha, Nico Melamed en el centro y Lázaro, en la izquierda, pero no tuvo poderío en ataque. A pesar de ello se mantuvo el mismo once tras el descanso.

El Almería, como no podía ser de otra forma, apretó intentando meterse en el partido, pero a pesar de dominar y llevar la iniciativa no encontraba la forma de superar al Deportivo. No era el día de los rojiblancos (de amarillo en Riazor). A los dos minutos de la reanudación Ximo Navarro le quitó el balón a Luis Suárez cuando se disponía a rematar a gol; en el diez, Leo Baptistao sirvió en profundidad a Lázaro, pero éste no acertó a controlar la pelota cuando estaba sólo ante el meta local; en el 65 Arnau se estrelló contra el portero del Dépor... El extremo catalán acababa de suplir a Leo Baptistao; Arribas a Nico Melamed y Melero a Robertone. Tres cambios para intentar cambiar la situación, pero era imposible. Además había que estar atentos a las contras de los gallegos con un Almería volcado. Yeremay a punto estuvo de marcar el cuarto, aunque Edgar lo evitó en la misma línea de gol.

El conjunto de Rubi lo seguía intentando una y otra vez, generaba peligro, disponía de ocasiones, pero su efectividad no era la habitual, ni mucho menos; todo lo contrario, al margen de que el portero local también estuvo brillante. Prácticamente en la última jugada del partido, Luis Suárez, en uno de los numerosos acercamientos, sí logró batir al portero del Dépor, dejando el resultado en 3-1.