2-3: Primera derrota del Almería en la Liga
Los rojiblancos se van al descanso con una clara ventaja en el marcador de 2-0, aunque también en inferioridad numérica. En el segundo tiempo el Racing igualó en un minuto y luego sentenció
El Almería sufrió la primera derrota de la temporada en la Liga al perder en casa por 2-3 frente al Racing de Santander en un partido en el que los rojiblancos pudieron ganar, incluso golear, pero una expulsión de Lopy en el minuto 27 y con 2-0 en el marcador, tuvo una incidencia muy negativa. Tanto, que los cántabros lo supieron aprovechar para remontar el encuentro.
Rubi sorprendió con el once inicial. Sobre todo, con el futbolista elegido para acompañar a Bonini en el centro de la zaga. Fue Baba, que llevaba nueve meses sin jugar debido a la grave lesión que sufrió la pasada temporada. El ghanés tuvo un excelente rendimiento. En la medular, junto a Lopy, Gui Guedes; por delante de ellos los tres “tenores” (Adrián Embarba, Sergio Arribas y Nico Melamed) y como “9”, en esta ocasión, actuó Leo Baptistao.
El equipo funcionó de maravilla, con solvencia atrás, generando y robando en la medular y dando un recital de buen fútbol ofensivo en ataque… Con los efectivos que había sobre el campo, la calidad marcaba el juego local. A los 18 minutos el Almería ya vencía 2-0 con dos golazos de Embarba y Nico Melamed. El encuentro era, prácticamente, un monólogo de los indálicos, de esos de dejar la boca abierta al oírlo. La ventaja se pudo ampliar y eso que en el 27 era expulsado Lopy por roja directa por pisar a un contrario… según el colegiado. Hubo muchas protestas. El jugar en inferioridad numérica no influyó porque el Almería, además, le ponía carácter y garra a su excelente juego. En el 33 Nico pudo hacer el 3-0, y en el 43 Leo Baptistao tuvo una clarísima oportunidad para que el equipo se hubiera ido al descanso con una renta mayor al 2-0.
Selvi suplió de inicio a Nico Melamed en el arranque del segundo período para dar mayor consistencia al centro del campo. El Racing arriesgaba con tres cambios ofensivos. Jeremy fue uno de los que salió al campo y fue determinante con dos tantos en sólo un minuto. El primero, en el 57, tras batir a Andrés Fernández de tiro cruzado después de una pugna con Baba. El segundo, en el 58 al aprovecharse, desde fura del área, de un rechace del meta local. El Almería acusó el golpe, no era para menos, pero lo seguía intentando y las alternativas se sucedían, aunque los cántabros daban mayor sensación de peligro aprovechando los espacios del conjunto almeriense.
A tenor de cómo se estaban desarrollando las cosas el 2-2 no era un mal resultado, pero es que además no se renunciaba a marcar el tercero. Claro, que tampoco el Racing, ya lanzado. En el minuto 75, falta lateral desde la derecha y Gustavo Puerta, que debutaba, marcaba el 2-3 de cabeza en el segundo palo. ¡Vaya mazazo! De ahí y hasta el final, un querer y no poder porque el resultado pesaba mucho, se jugaba en inferioridad numérica y el líder supo utilizar sus armas para llevarse la victoria.





































