1-0: El Almería pierde un “comodín” para poder salir del descenso
Hubo un tiempo para cada equipo con la diferencia de que el Córdoba fue más efectivo en el primer período, que los almerienses en el segundo
El Almería ha perdido un “comodín” para poder salir del descenso y da un paso atrás en sus aspiraciones tras su derrota por la mínima en Córdoba y los resultados registrados en la jornada. En cualquier caso, la permanencia está a dos puntos y ahora la marca el UCAM Murcia. En el Nuevo Arcángel hubo un tiempo para cada equipo con la diferencia que los cordobeses fueron más efectivos en el primer período, en el que marcaron, que los almerienses en el segundo, donde llegaron a tener una posesión del 57 por ciento. En cualquier caso su fútbol no fue el de anteriores jornadas.
Luis Miguel Ramis realizó cambios en el once inicial, uno obligado por la baja de Fidel, por sanción, y otros al recuperar a jugadores que tenía lesionados. En este sentido optó por situar a Nano en la banda izquierda, mientras que por detrás de él, en el lateral, situó a Isidoro. Además Joaquín, tras su suspensión, volvía al doble pivote junto a Borja Fernández; por delante de ellos jugaba Pozo en tareas ofensivas, quedándose en el banquillo Kalu Uche.
Un equipo con el que el Almería iba a buscar obtener un resultado positivo para intentar salir del descenso, aunque delante tenía a un rival directo, directísimo, que ponía en liza una formación muy ofensiva para evitar que nuestros representantes lo mandara a la “zona roja” de la clasificación, ya que los cordobeses marcaban los puestos de permanencia con un punto de ventaja sobre los rojiblancos.
Las intenciones del Almería no se pudieron trasladar al terreno de juego, puesto que tras unos primeros minutos muy intensos y de alternativas, fue el Córdoba el que pasó a llevar la iniciativa y a dominar, mientras que el conjunto almeriense no se estaba cómodo en el campo y no exponía los argumentos futbolísticos de jornadas anteriores.
Como consecuencia de ello, en el minuto 13 Markovic, sin oposición dentro del área, lograba el 1-0 tras un centro de Pedro Ríos. En la jugada, Rodri hizo falta sobre Casto, que el colegiado no advirtió, como tampoco una agresión sobre Antonio Puertas, poco después.
Ramis, a tenor de lo que estaba viendo, hizo cambio de posiciones. Pasó a Isidoro al lateral derecho, Motta adelantó su posición, y en la banda contraria Nano regresaba a su puesto habitual y Puertas actuaba en el extremo zurdo. El Almería ganó en consistencia, y contrarrestó el dominio de los cordobeses, que pudieron marcar en el minuto 37 por medio de una falta directa lanzada por Javi Lara que se fue fuera por poco.
En el minuto 44 Joaquín robaba un balón en la medular, pasaba sobre Pozo, y éste servía de manera brillante a Quique, que se internó en el área pero se quedó sin ángulo de tiro. Fue la única llegada con peligro de nuestros representantes durante estos primeros cuarenta y cinco minutos.
De salida en el segundo período Ramis ponía en liza a Gaspar, con lo que volvía a hacer cambios de posición. El jugador del B se situaba de extremo izquierdo, Puertas regresaba al derecho y Motta se situaba otra vez el lateral. El Almería mejoraba y se hacía con el control del encuentro.
De hecho pasaba a tener la pelota, tocaba con criterio y comenzaba a llegar arriba con peligro. En el minuto 59 Gaspar, muy activo, se internaba por la izquierda tras recibir de Pozo, centraba y Quique, en el segundo palo, no llegó por poco a meter el pie.
Nuestros representantes hacían un buen trabajo, dominaban, entraban bien por banda, pero los centros no eran certeros y tampoco había remate claro dentro del área. En cualquier caso lo intentaba. Aguza, en una rápida transición del Córdoba, lanzaba al poste, pero el partido daba la impresión de estar más cerca del empate porque el Almería empujaba.
En el minuto 75 Ramis hacía un doble cambio para ir a por todas. Sacaba a Ramón Azeez y a Uche por Joaquín y Mota. El equipo se quedaba con defensa de tres y arriesgaba al máximo. En el 82, Quique, dentro del área y a la media vuelta, disparaba al primer palo y el meta local detenía el esférico. Las acciones del Almería no tenían la continuidad necesaria porque el Córdoba perdía el tiempo, jugaba sus bazas y con estos argumentos concluía el encuentro. La posesión de los rojiblancos –de azul en el Nuevo Arcángel- fue del 57 por ciento en el segundo período-, algo realmente significativo, pero que no tuvo su recompensa en el marcador.